Es necesario realizar esta operación para prevenir un mayor deterioro de la madera que la dejará inservible.
Cubre con cinta adhesiva los bordes de los cristales para que no se manchen con el barniz. La cinta protectora de pintor es de papel. Se pega muy fácilmente y se quita igual de bien. Protege también los alfeizares de las ventanas y bajo las puertas, pon unos papeles de periódico. Recuerda que los productos para exteriores son muy resistentes y por tanto, también es difícil eliminar las manchas.
Si la madera lleva tiempo sin barnizar, es posible que las zonas más expuestas a la lluvia o al sol se hayan desprendido cuartando o descascarillado. Es importante que cortes bien el barniz estropeado de lo contrario, volverá a desprenderse aun habiendo pintado sobre él. Usa una espátula o un cepillo metálico fuerte.
Si la madera no está perfectamente curada en el momento de empezar a trabajar, se agrietará. Es necesario rellenar las gritas porque abren la capa protectora que es el barniz dejando pasar la humedad. Usa una pasta color madera aplicándola con una espátula en las grietas limpias y alisándola lo más posible. Si te quedan pegotes, líjalos con papel grano medio. Desempolva todo antes de poner el barniz. Si la capa anterior está en buen estado, pásale un poco de agua jabonosa acláralo bien y déjalo secar.
Empieza por decidir el acabado que prefieras. Los barnices para exteriores suelen ser brillo pues resisten más. Empieza barnizando con una brocha redonda, para que sea más cómodo hacer los bordes y los rincones. No barnices los herrajes para no impedir su movimiento una vez que se haya secado el barniz.
Sin dejarlo secar, pasa a hacer las superficies mayores. Resulta más cómodo emplear una brocha plana (paletinas) No olvides que siempre da mejor resultado dar dos manos finas que capa gruesa, porque dejan mejor pegadas y reduce el riesgo de que se cuarteen.
A ser posible, trabaja a la sombra, si lo haces al sol se secará demasiado deprisa
Después de dar la última mano quita la cinta protectora y los papeles, no dejes secar el barniz porque resulta más fácil despegar la cinta cuando está un poco fresco. Aprovecha entonces para aceitar o engrasar los herrajes y ventanas. Repara las gotas al cabo de un rato después de este trabajo puertas y ventanas estarán listas para aguantar un par de años.
MATERIALES EMPLEADOS:
– Cinta adhesiva de pintor
– Espátula
– Cepillo de alambre
– Masilla tapagrietas
– Barniz exterior o protector
– Brocha redonda
– Brocha plana
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